Mis ojos por momentos quieren llover, quieren demostrar la debilidad que vive en mí y que nadie se entera, mis ojos quieren mostrar que el miedo está apoderándose de lo que yo realmente siento, de que la cobardía estaría apunto de visitarme si no salgo rápido hoy de mi cuarto.
Mi mente está apunto de olvidarse que tiene cosas más valiosas y mi razón está apunto de salirse por la borda.
Mi sentido común se va
olvidando de que tiene que acompañar a la razón para que esta no se vaya, se está olvidando y se está juntando más al lado del egoísmo y del materialismo.
Mi
felicidad de algunos días cogen el primer tren que sale a las seis de la mañana y se toman un día libre.
Está apunto de irse a la mierda y yo sigo aquí metida entre todos estos que los sostengo con una soga más noble que mis ganas de ayudar.
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